
La semana pasada Pau Gasol aseguró que se plantea su presencia en los Juegos Olímpicos de Río de este verano por la inquietud que le genera el virus Zika. Sus palabras pronto tuvieron el apoyo de otro deportista de élite como Rudy Fernández. Ambos, demandaron claridad en las explicaciones, información véraz y que las autoridades aseguren la seguridad de los participantes en los Juegos. Estas opiniones coinciden con las recomendaciones de EEUU de no asistir a los Juegos Olímpicos de Río.
A través de una carta abierta, un grupo de 170 científicos encabezada por los profesores Amir Attaran (Universidad de Ottawa), Christopher Gaffney (Universidad de Zúrich), Arthur Caplan y Lee Igel (Universidad de Nueva York) han dado la voz de alarma instando tanto a la Organización Mundial de la Salud (OMS) como al Comoté Olimpico Internacional (COI) a aplazar o cambiar de sede las competiciones debido a este virus. Esta opinión coincide en su totalidad con la expresada con el Centro para el Control de Enfermedades (CDC) recomendando a todos los trabajadores “retrasar sus viajes a áreas con transmisión activa del virus del Zika”. Los expertos se han mostrado preocupados ante la posibilidad de que la OMS rechace las alternativas propuestas, el retraso o traslado de los Juegos, debido a algún tipo de conflicto de interés ya que la organización participa en una asociación con el COI, a través de un memorando de entendimiento que aún se mantiene bajo secreto.
Las autoridades olímpicas y políticas no se plantean la posibilidad del retraso o traslado a menos de tres meses de los Juegos, cuando esperan la visita de cerca de un millón de turistas y cuando según la OMS no tiene sentido aplazar los juegos puesto que esta decisión no alteraría de forma “significativa” la expansión del virus. Coincidente con esta opinión se encuentra la del presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, que ha asegurado que la OMS garantiza que no hay motivos para suspender los Juegos de Brasil y que los Juegos de Río se celebrarán en condiciones razonablemente aceptables para la salud de los asistentes.
Es completamente comprensible el miedo desatado. La OMS declaró en febrero la emergencia mundial el brote del virus del Zika que se ha extendido por varios países de América Latina, afirmando que existen indicios suficientes para acelerar la adopción de medidas y las labores de investigación. No podemos olvidar tampoco que las Olimpiadas llevarán a Brasil a más de un millón de turistas extranjeros. Con la poca información que se tiene sobre el virus el riesgo de expansión internacional existe.
El virus Zika
El virus Zika es un virus ARN del género Flavivirus, (familia Flaviviridae), estrechamente relacionado con el virus Spondweni y fue aislado por primera vez en 1947 en un mono de la selva de Zika, en Uganda (África) siendo el primer caso humano descrito en Nigeria en 1952.
La transmisión del virus Zika.
- Picadura de mosquitos del género Aedes: Ae. aegypti, (zonas tropicales y subtropicales de Américas y África), Ae. albopictus, denominado mosquito tigre, (áreas más templadas) y Ae. polynesiensis o Ae. hensilli, (Pacífico). Todas estas especies suelen picar exclusivamente durante el día, en particular a media mañana y a última hora de la tarde, pero no suelen hacerlo durante la noche.
- Transmisión perinatal, posiblemente a través de la placenta o durante el parto, cuando la madre está infectada.
- Transmisión sexual.
- Transfusiones sanguíneas.
Los primeros brotes de enfermedad por el virus Zika se describieron en el Pacífico en 2007 y 2013 (Yap y Polinesia francesa, respectivamente), y en las Américas (Brasil y Colombia) y África (Cabo Verde) en 2015. Desde el 1 de enero de 2007, se ha notificado la transmisión del virus Zika en 64 países y territorios.
Síntomas y signos.
El periodo de incubación de la enfermedad no está claro pero parece que podría oscilar entre 3 y 12 días, tras la picadura del mosquito.
Los síntomas consisten en fiebre, erupciones cutáneas, conjuntivitis, dolores musculares y articulares, malestar y cefaleas; suelen ser leves y durar entre 2 y 7 días.
Posibles complicaciones de la enfermedad.
Durante los grandes brotes que se han producido en la Polinesia francesa en 2013 y en el Brasil en 2015, las autoridades sanitarias nacionales notificaron potenciales complicaciones neurológicas y autoinmunitarias.
Recientemente, en el Brasil, las autoridades sanitarias locales han observado un aumento de las infecciones por este virus en la población general y, coincidiendo con él, un aumento de los casos de síndrome de Guillain-Barré y de los recién nacidos con microcefalia en el nordeste del país.
Una cantidad considerable de nuevas investigaciones han reforzado la asociación entre la infección por este virus y la aparición de malformaciones fetales y trastornos neurológicos. No obstante, son necesarias más investigaciones para entender mejor esa relación. Asimismo, se están investigando otras causas posibles.
Prevención
Los mosquitos y sus lugares de cría suponen un importante factor de riesgo de infección por el virus Zika.
La prevención y el control dependen de la reducción del número de mosquitos a través de la reducción de sus fuentes (eliminación y modificación de los lugares de cría) y de la disminución de los contactos entre los mosquitos y las personas.
Para evitar las picaduras:
- Utilizar repelentes de insectos regularmente. La Agencia Española del Medicamente y Productos Sanitarios ha elaborado una lista con los repelentes autorizados para prevenir las picaduras
- Usar (colores claros) que cubra al máximo el cuerpo.
- Instalar mosquiteros en los edificios.
- Mantener puertas y ventanas cerradas.
- Dormir bajo mosquiteros de cama durante el día.
- Vaciar, limpiar o cubrir regularmente los contenedores que puedan acumular agua.
Para evitar la transmisión sexual:
- Todas las personas que se hayan infectado con el virus Zika y sus parejas sexuales deben tener prácticas sexuales seguras, utilizando preservativos de forma correcta y sistemática.
- Las parejas sexuales de embarazadas que vivan en zonas con transmisión local del virus o de retorno de esas zonas deben tener prácticas sexuales seguras, utilizando preservativos, o abstenerse de las relaciones sexuales.
- Quienes vivan en zonas con transmisión local del virus deben tener prácticas sexuales seguras o abstenerse de las relaciones sexuales.
- Quienes estén de retorno de zonas con transmisión local del virus deben adoptar prácticas sexuales seguras o abstenerse de las relaciones sexuales durante un mínimo de 4 semanas tras el retorno, a fin de reducir el riesgo de transmisión ulterior.
Tratamiento
La enfermedad por el virus Zika suele ser relativamente leve y no necesita tratamiento específico.
Los pacientes deben estar en reposo, beber líquidos suficientes y tomar medicamentos comunes para el dolor y la fiebre. Si los síntomas empeoran deben consultar al médico.
En la actualidad no hay vacunas.