Hoy hablaremos del Background Screening, término en uso creciente en nuestra jerga empresarial. Más aún, veremos cómo puede ayudar a nuestra empresa el tomarlo en consideración: sus beneficios, áreas de aplicación, efectos preventivos… en suma, intentaremos responder a esta pregunta ¿cómo puede ayudar a mi empresa el Background Screening?
¿Qué es el Background Screening?
Lo podemos traducir como –Proyección de antecedentes–. El Background Screening es un proceso, una metodología que se implanta para reducir riesgos en la contratación de nuevos empleados, fundamentalmente por tomar la decisión equivocada. Es especialmente interesante / utilizado por los departamentos de Recursos Humanos y Selección de Personal de las empresas más avanzadas en estas materias. No podemos ignorar que una contratación en plantilla tiene costes inmediatos y futuros para la empresa: costos asociados con el despido, búsqueda del reemplazo, posibles costes legales (compliance) o incluso aquellos costes que puede producir el propio mal desempeño de la tarea. Existen también otros costes intangibles (que pueden ser tangibles en forma de lucro cesante por pérdida de clientes) como puede ser el daño causado a la reputación de la empresa por esa persona que no debió trabajar nunca para nuestra organización.
¿Cómo se articula?
El Background Screening trabaja tratando de obtener el máximo de información previa al empleo de cada candidato. Su labor preventiva se aplica a evitar “sorpresas” desagradables en el futuro, cuando esa persona ya es trabajador de pleno derecho de la plantilla. En primer lugar va a valorar objetivamente la información que el candidato estudiado aporta (verificación de titulaciones académicas, historial y recorrido laboral, referencias, salud financiera…) De forma yuxtapuesta, se va a sondear toda la información posible acudiendo a muy diversas bases de datos y/o fuentes. De paso diremos que no es un secreto ya, que los recruiters o reclutadores de personal entran incluso en los perfiles sociales de los candidatos para estudiar su propensión a la tranquilidad o el desenfreno en su tiempo libre. De ahí que hayan proliferado las empresas dedicadas al –derecho al olvido– en Internet, es decir, aquellas que borran definitivamente aquel contenido en la red del que no estamos totalmente orgullosos o que preferimos mantener en una parcela de estricta intimidad.
En Peritos Expertia, aportamos a este sondeo global que llamamos Background Screening un elemento tan interesante como el estudio de grafología laboral. En la manuscrita de cada uno, afloran de manera inconsciente (no podemos controlarla de forma voluntaria) rasgos de nuestra personalidad y nuestra actitud. De ahí que estudiar documentos manuscritos por el candidato nos dé pistas fiables sobre su grado de empatía, organización, creatividad, predisposición para el trabajo en equipo, conflictividad…
Y dado que la reciente reforma del Código Penal habla de la responsabilidad jurídica de las empresas, los programas de Background Screening como el que hoy comentamos son de especial interés para los Programas de Compliance que hoy por hoy son de obligada implantación en las organizaciones. Si en el futuro alguien comete una irregularidad en el seno de la organización, la empresa podrá decir que hizo lo posible por detectar esa patología.
¿Solo para contratación de personal?
No. El Background Screening en tanto que es una medida de sensatez, se aplica también a otras decisiones de la vida de la empresa. En Peritos Expertia, por ejemplo, ofrecemos un servicio de Investigación de Socios de forma previa a la firma o constitución de una nueva relación societaria. La Due Diligence, por citar otro ejemplo ¿qué es si no una –Proyección de antecedentes– de la empresa a la que nos vamos a fusionar, comprar, traspasar…
Diversos estudios, de fuentes tan heterogéneas que nos hacen imposible quedarnos con una, coinciden en señalar que prácticamente la mitad de los currículum vitae que se entregan en el mundo contienen exageraciones, información falsa etc. para hacer parecer mejor al candidato. Teniendo en cuenta el coste que tendrá para la empresa equivocarse al elegir al empleado o al nuevo socio ¿no es mejor hacer una investigación de socios o un informe grafológico previo?